El Informe de la Ponencia recoge aportaciones acertadas, rechazadas por el Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP), pero insuficientes. CCOO va a seguir denunciando cualquier acción, propuesta y medida que se deriven de la actual Ley Orgánica de Educación impuesta por el PP, y aún en vigor: la LOMCE. El Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) debe tener en cuenta como paso previo a cualquier decisión de calado la opinión de la comunidad educativa, sindicatos incluidos, a través del diálogo y la negociación. Desde CCOO, mayoritario en el sector de la educación, no apoyaremos aquellas políticas educativas de las que no seamos partícipes.
¿Por qué no apoyamos el Proyecto de Orden Ministerial?
- Se limita a prorrogar la Orden Ministerial que presentó el Partido Popular para el curso 2017-2018.
- Es un Proyecto de Orden Ministerial claramente LOMCE, ley educativa a la que de forma clara y manifiesta se opusieron las organizaciones que firman el presente voto particular.
- Se centran en determinadas materias (Matemáticas, Lengua Castellana y Literatura, Geografía e Historia e Idiomas), que se denominan troncales, y se prescinde de otras (artísticas, deportivas…) que en realidad son igualmente importantes, pero que, para quienes promueven este tipo de pruebas, son de segunda categoría.
- Aunque se justifican por la intención de evaluar por competencias, en realidad miden principalmente
- Son una foto fija que se realiza en un momento determinado, obviando el proceso seguido, la mejora conseguida, las características personales del alumnado y sus diferentes ritmos de aprendizaje y maduración.
- Se lanza un mensaje de desprestigio del profesorado, al desconfiar abiertamente de su labor y, en especial, de la evaluación que este
- Los docentes se convierten en meros preparadores de pruebas externas, dejando de enseñar y sucumbiendo a la función de
- Estandarizan la evaluación para cerrar los currículos, abocando a que se estudie solo aquello que se evaluará.
- Este tipo de pruebas estandarizadas intentan perpetuar el aprendizaje memorístico y
- Los estudios demuestran que los recursos empleados en las pruebas estandarizadas no han logrado mejoras en los sistemas Al contrario, se han observado efectos negativos, además de cuestionarse seriamente este tipo de pruebas por sus habituales defectos técnicos.
Institucionalizar la inutilidad
Aparte de lo ya expresado, la norma que nos ocupa no respeta ni tan siquiera el marco legal vigente incorporando cuestiones en su contenido que lo modifican, con independencia de que hayan sido negociadas con las comunidades autónomas, como así argumentan los responsables del MEFP.
En todo caso, dicha configuración hace imposible que estas pruebas sean comparables entre las diferentes comunidades autónomas, por lo que ni tan siquiera podrán servir para intentar obtener un diagnóstico del sistema educativo español. Al contrario, facilita que cada Administración educativa intente dar forma a la prueba que realice de manera que los resultados caminen en el sentido que desean antes de hacerlas. Es decir, la norma actual persiste en institucionalizar la inutilidad de dichas pruebas.
Consideramos, además, a las CCAA cómplices de una orden técnicamente deficiente e ideológicamente inasumible por parte de la comunidad educativa, ya que es un producto de la LOMCE, aprobada con los votos exclusivos del Partido Popular y, en su día, rechazada por la totalidad de la comunidad educativa y por el conjunto de la oposición parlamentaria.