LOS REALES DECRETOS 901/2020 Y 902/2020 APUNTAN A LAS DIFERENCIAS SALARIALES ENTRE MUJERES Y HOMBRES, que suelen ser la punta del iceberg de desigualdades que han persistido durante demasiado tiempo, normalizándose en nuestra sociedad. Podríamos pensar que las universidades son entidades punteras y ejemplo de ruptura con los convencionalismos retrógrados del pasado, buque insignia en la defensa de las libertades y de la igualdad. Pero los datos arrojan cifras similares a las de ámbitos laborales de diversa índole.