QUE EL PLANETA TIERRA ESTÁ AGONIZANDO ES ALGO DE LO QUE YA NADIE DUDA, salvo quizás los negacionistas irredentos e irracionales y los populistas de extrema derecha. Ni siquiera los que hasta hace poco hacían campañas arrinconando las evidencias científicas, como por ejemplo las grandes empresas energéticas, se atreven ya a discutir lo que miles de científicos llevan advirtiendo desde el año 1972.