EL OBJETIVO ES CLARO. HAY QUE CONSEGUIR LA REVERSIÓN DE LOS RECORTES, la dignificación de las condiciones de trabajo y la derogación de la LOMCE y las contrarreformas universitarias. El grito que lanza la comunidad educativa debe llegar al Gobierno. O más bien, el Ejecutivo debería escucharlo y negociar un nuevo pacto educativo. Sin embargo, el PP solo piensa en continuismo. Por ello, el sector de la enseñanza paró ayer la educación. Una vez más. Cerca del 65% de trabajadores de la enseñanza y el 85% del alumnado y sus familias han secundado la huelga general del 9 de marzo.