LAS POLÍTICAS SOCIALES Y EDUCATIVAS DEBEN CREAR CONCIENCIA MORAL. Para que se produzca esta circunstancia la acción política debe tener la ética como elemento vertebrador de cualquier medida y norma. Pero la realidad es otra. La modernidad neoconservadora ha hecho “portamonedas con piel humana”1. Es la consecuencia del “beso de la muerte” de la austeridad para millones de personas en España. Los flecos de una política económica que, forzosamente, tenía que crear la bolsa de desheredados y desheredadas necesarios para enriquecer a una minoría ya rica antes de la llamada crisis: el nuevo modelo económico pensado para unos pocos.