EN EL CURSO 2011-2012, SE INICIÓ EL PROGRAMA BILINGÜE DE LA COMUNIDAD DE MADRID (PBCM) EN DISTINTOS INSTITUTOS PÚBLICOS, con la intención de acoger al alumnado de colegios donde había comenzado en 2004-2005. Presentado, entonces, como una propuesta de innovación educativa y un exponente de calidad, veinte años después este modelo se revela como un ejemplo perfecto de sistema de segregación institucional.