El texto aborda las agresiones más groseras por ser el corazón de la escuela pública: modelo de escuela y modelo de sociedad, el fracaso escolar, la LOMCE, participación y eficiencia, capacitación del profesorado, el Distrito único, los CIS…
En la mayoría de los modelos educativos, la enseñanza pública tiene un peso y un papel decisivos, porque es la que se adecua a los intereses generales de las sociedades democráticas, pluralistas y no confesionales. Sería el modelo constitucional por antonomasia.
Hay un reciente informe de la Unión Europea: European Social Progress Index ( Índice de Progreso Social en Europa) en que se analizan 272 regiones europeas entre las cuales la Comunidad Valenciana ocupa el puesto 253 en la educación, tomando los tres índices de referencia de estudio: abandono escolar temprano, número de ciudadanos que solamente tienen titulación básica y tasa de matriculados en estudios secundarios.
Un ensayo como este, comprometido hasta los tuétanos con la enseñanza pública, solo puede ser útil a ese compromiso si encuentra lectores, conecta con ellos y estos lo hacen suyo y lo convierten en fuerza material para el cambio. Sin compromiso no hay cambio, hay diletantismo.
Los autores:
Pura Aloy Pantín: Profesora de enseñanza secundaria. Ha sido directora de IES y perteneció al Movimiento de Renovación Pedagógica del Seminario de Pedagogía del Colegio de Licenciados de Valencia.
Francisco Hernández Sánchez: Se graduó en la Escuela de Magisterio de Murcia y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Valencia. Ha trabajado en la Enseñanza Primaria, en la Secundaria y en Centros de Adultos. Participó en los MRP de los años 60-70 del siglo pasado.