Sindicarse para una vida digna

ENTRAS EN LA UNIVERSIDAD Y DECIDES QUE TE QUIERES DEDICAR A LA INVESTIGACIÓN. Debes empezar desde el primer día a recopilar méritos para ello: te han contado que es una carrera muy complicada y que tiene gran precariedad. Tienes 18 años y probablemente tengas que compatibilizar tus estudios con otras responsabilidades, familiares o laborales. También tienes que aspirar a la máxima nota.

Las mujeres lideran de facto, pero no de iure

LOS DATOS PUBLICADOS POR EL MINISTERIO DE UNIVERSIDADES MUESTRAN QUE EL 60% DEL ESTUDIANTADO QUE SE GRADUÓ EN EL CURSO 2020-2021 FUERON MUJERES, así como que el aumento porcentual ha sido progresivo durante los últimos años, ensanchándose cada vez más la diferencia con respecto a los hombres. Con todo, la letra pequeña refleja una realidad no tan optimista.

Adrià Junyent Martínez. Secretario de Juventud de CS CCOO

“La juventud está muy implicada en temas sociales, solo falta que también se implique en el sindicalismo para mejorar su día a día”

LA PRECARIEDAD JUVENIL SE HA CONVERTIDO EN EL CABALLO DE BATALLA DE ADRIÀ JUNYENT. El secretario de Juventud de CCOO, de 28 años, recuerda que los derechos hay que pelearlos y, aunque reconoce que es complicado no ser joven y precario, les anima a afiliarse para mejorar sus condiciones laborales y de vida: “El salario medio neto anual de las personas de entre 16 y 30 años es de 10.000 euros. Es una cifra irrisoria”, afirma.

El profesorado y los cambios que trae la nueva Ley de FP

LA PROBLEMÁTICA DEL PROFESORADO TÉCNICO DE FORMACIÓN PROFESIONAL (PTFP) se remonta a la Ley General de Educación (LGE) de 1970. Esta estableció dos cuerpos de docentes de Formación Profesional: maestros de taller, que impartían las asignaturas más prácticas y eran titulados en Formación Profesional; y profesores numerarios, que se encargaban de las asignaturas teóricas y eran titulados universitarios.

Luis García Domínguez. Director del IES Puerta Bonita de Madrid y presidente de FPEmpresa

“Es necesario un consenso de país que nos asegure que, si vienen mal dadas, no se nos tratará como el patito feo”

LA GRAN REVOLUCIÓN DE LA EDUCACIÓN ESPAÑOLA se llama Formación Profesional. Después de décadas relegada a una opción de segunda, la falta de personal cualificado que dé respuesta a las demandas de un mercado laboral ávido de técnicos la ha impulsado a los altares de la empleabilidad. Olvidada la mala fama, ahora los retos, que llegan de la mano de la nueva Ley de FP, son otros. Luis García Domínguez, director del IES Puerta Bonita de Madrid, los reduce a uno que engloba a todos: financiación suficiente.