Democracia en las aulas: recordar el pasado para construir el futuro

NORMALMENTE ASOCIAMOS MEMORIA A LA CAPACIDAD PARA RECORDAR. Podemos también hablar de nuestra memoria por todo lo contrario, por la facilidad para olvidar. Has vivido algo, estudiado, leído o visto, te lo han contado y lo olvidas, de forma paulatina e involuntaria, a pesar de que quieras recordarlo. También puede ocurrir que seas tú quien hace por olvidar. Coges esa vivencia, ese recuerdo y lo entierras en el fondo de tu mente para que ni el cuerpo se acuerde.

El maestro que prometió el mar

“DESDE EL FIN DE LAS GUERRAS CIVILES Y CONFLICTOS MUNDIALES QUE ASOLARON EUROPA EN EL SIGLO XX, Y ESPECIALMENTE DESDE EL HOLOCAUSTO, el impulso de las políticas de memoria democrática se ha convertido en un deber moral que es indispensable fortalecer para neutralizar el olvido y evitar la repetición de los episodios más trágicos de la historia. El firme compromiso con la pedagogía del «nunca más» se ha convertido en un imperativo ético fundamental en las sociedades democráticas en todo el mundo”.

No nos robarán la memoria

“DESDE EL FIN DE LAS GUERRAS CIVILES Y CONFLICTOS MUNDIALES QUE ASOLARON EUROPA EN EL SIGLO XX, Y ESPECIALMENTE DESDE EL HOLOCAUSTO, el impulso de las políticas de memoria democrática se ha convertido en un deber moral que es indispensable fortalecer para neutralizar el olvido y evitar la repetición de los episodios más trágicos de la historia. El firme compromiso con la pedagogía del «nunca más» se ha convertido en un imperativo ético fundamental en las sociedades democráticas en todo el mundo”.