Para CCOO, el sistema de ingreso a la función pública docente debe ajustarse al modelo de un concurso-oposición basado en los siguientes principios:
- Las capacidades didácticas y pedagógicas de las personas aspirantes serán la base del proceso selectivo. Entre estas deben incluirse el trabajo en equipo, la empatía, la atención de calidad al alumnado más vulnerable y sus familias, la organización del aula, la planificación y la aplicación de buenas prácticas.
- El conocimiento de las necesidades y los derechos de la infancia y de la adolescencia.
- La capacidad social de relacionar el centro con el entorno.
- Los instrumentos para evaluar los conocimientos de la materia a enseñar deben permitir valorar, fundamentalmente, la capacidad de estructuración y elaboración, al tiempo que proporcionan información sobre la actualización de la persona opositora.
- La experiencia docente debe ser reconocida, como en otros ámbitos, garantizando el equilibrio necesario para posibilitar el acceso a quienes no tengan experiencia docente.
- Todas y todos los aspirantes deben poder demostrar en las diferentes fases del proceso selectivo sus conocimientos, competencias y capacidades, incluyendo aquellas adquiridas con anterioridad al proceso selectivo.
- Este debe ser transparente e incluir mecanismos que garanticen la equidad, incluyendo la reducción del número de aspirantes por tribunal, la publicación de los criterios de valoración, la garantía del anonimato, la revisión de las pruebas por parte de la persona aspirante, la adaptación a quienes presenten diversidad funcional, etc.
El MEFP recoge que “se espera que el sistema de prácticas del concurso-oposición sirva como instrumento real para formar y evaluar a los futuros funcionarios de carrera docente, y no sea un mero requisito formal”. Este texto requiere una explicación clara, que evite al Ministerio un problema de difícil solución, pues ¿qué sucede si la evaluación no es positiva?
El problema viene en los centros concertados, para los que no se exige este requisito ni ningún otro regulado que garantice el acceso o la selección de calidad de los y las docentes de dichos centros.
En la evaluación de las prácticas debe intervenir el equipo docente del centro, así como profesorado de la misma etapa, especialidad, etc. Debe existir, además, un reconocimiento por su labor docente e investigadora, tanto económicamente como en términos de reducción de horas lectivas.
En lo que respecta al acceso a otros cuerpos y la adquisición de nuevas especialidades para el funcionariado de carrera, debe abordarse una simplificación de esos procesos teniendo en cuenta la carrera profesional y los méritos de las personas aspirantes.
